Viajamos al Encuentro Nacional de Mujeres.

En octubre del año pasado, tuvo lugar en la Ciudad de Mar del Plata el 30° Encuentro Nacional de Mujeres. El evento consiste en una reunión que se realiza anualmente en la Argentina desde 1986, denominado como un espacio de mujeres autónomo, auto-convocado, democrático, pluralista, autofinanciado, federal y horizontal. Se realiza en distintas ciudades del país cada año, eligiéndose la nueva sede democráticamente en la asamblea final de cada Encuentro.

El cronograma.

Aunque los medios de comunicación masiva hayan puesto el foco en los disturbios ocurridos en la Catedral, el Encuentro duró tres días e incluyó numerosas y variadas actividades.

SÁBADO 10 --> Mañana: Acto Apertura. Tarde: Talleres en distintas escuelas de la zona (32 temáticas para abordar en los grupos y elaborar conclusiones y propuestas). Noche: Agenda cultural (actividades gratuitas en teatros, cines, centros culturales y plazas).

DOMINGO 11-->  Mañana y Tarde: Talleres. Tardecita: Movilización por las calles de la ciudad. Noche: Peña.

LUNES 12 -->  Mañana: Acto de Cierre. Elección de la próxima Sede. Lectura de las conclusiones elaboradas en los talleres.

DATOS DE COLOR

El Acto de Apertura se realizó en el estacionamiento del Estadio de Mar del Plata, donde también estaba previsto realizar el cierre. La asignación del lugar por parte de las autoridades municipales se percibió como un intento por invisibilizar el evento, por este motivo se promovió éxitosamente desde los talleres la idea de cambiar el sitio para la actividad final y la misma se llevó a cabo en la calle.

Bajo la consigna “Sin Emergencia Nacional, no hay #NiUnaMenos” marchamos más de 60.000 mujeres haciendo un recorrido de 40 cuadras que incluía los puntos locales característicos de la lucha por igualdad y justicia. Para resaltar y valorar algunos logros y llamar la atención sobre los reclamos pendientes algunas de las paradas fueron: un prostíbulo clausurado, la delegación del Ministerio de Trabajo y la sede de Tribunales. La Catedral no era parte del recorrido establecido por la comisión organizadora, pero como es habitual una columna se desvió para reclamar frente al templo por la influencia que tiene la Iglesia Católica sobre la decisión de legalizar el aborto y el discurso conservador que refuerza los estereotipos de género. El enfrentamiento de esta columna con un grupo de religiosos y la policía terminó con tres compañeras demoradas dentro de la iglesia durante tres horas, que salieron golpeadas recién a la medianoche.

En el taller de “Mujeres y Organizaciones Sindicales” debatimos compañeras de distintas agrupaciones y provincias. El factor común fue la precarización laboral, incluido el pago de salarios en negro y gris por parte de los distintos gobiernos municipales, provinciales y nacional. La problemática se analizó con un enfoque de clase, comprendiendo que nos afecta tanto a hombres como a mujeres, pero enfatizando la doble condición de explotadas y oprimidas por el sistema capitalista y patriarcal en el que vivimos. Los casos de acoso y violencia física, y la injusta presión social por cumplir con las tareas domésticas como si fueran nuestro patrimonio exclusivo son los agravantes a los que debemos enfrentarnos las trabajadoras día a día. Se evidenció la ausencia de planes genuinos por parte del Estado para combatir las problemáticas de género y se compartieron experiencias de las distintas agrupaciones donde las mismas paliaban dicha carencia con gran esfuerzo y compromiso, logrando ayudar a muchas mujeres del entorno.

Durante el acto de cierre, representantes de distintas provincias propusieron ciudades para la realización del próximo encuentro. Luego de una reñida votación que se define tradicionalmente por aplausos, quedó establecida la próxima sede: ¡Rosario nos espera! 

Ingresando al estadio donde
se realizó el Acto de Inicio.

Antes de comenzar la masiva movilización.

Marchando por las calles de la ciudad al son de
♪♫Ni una muerta, ni una más.
Gritemos todas emergencia nacional♫♪

A la medianoche, tres compañeras seguían demoradas
adentro de la Iglesia después de haber sido
agredidas por un grupo de religiosos que querían
impedir las pintadas de reclamo.
La Policía custodiando el edificio.